Durante estos meses hemos estado hablando de la necesidad de que nuestras instalaciones frigoríficas sean eficientes energéticamente y durante todo este tiempo hemos recalcado la importancia de contar con unos equipos y materiales de calidad. Sin embargo, no son solo esos los aspectos determinantes, el instalador de la cámara y el mantenimiento que se haga de ello, también tienen mucho que ver. En este artículo te explicamos el porqué.
¿Qué es la eficiencia energética?
Podemos definir la eficiencia energética como la optimización del consumo energético hasta alcanzar el servicio deseado. Ante el panorama actual de precios inasumibles de la electricidad, el abuso de energías fósiles y altamente contaminantes y el desarrollo escaso de las energías renovables, intentar reducir nuestro consumo es uno de los retos más importantes a los que nos enfrentaremos durante estos próximos años.
¿De qué elementos depende la eficiencia energética de una cámara?
Además del equipo, dentro de una cámara frigorífica intervienen múltiples componentes que también son claves para conseguir una adecuada eficiencia energética.
Nos referimos al diseño completo de la instalación, el aislamiento de la misma y las pruebas que se realicen durante el montaje, la calidad de los materiales empleados, la ubicación, la detección de fugas...
Como podemos observar, existen otros muchos diversos factores a tener en cuenta durante el desarrollo y ejecución del proyecto que tendrán un impacto importante sobre el consumo energético.
El instalador
Como hemos visto, podemos mejorar la eficiencia energética en cada una de las fases del diseño del proyecto, desde su diseño hasta el mantenimiento. Se ha demostrado que un mantenimiento deficiente de la instalación puede elevar la factura hasta un 15%.
Es por esto necesario contar con un instalador de confianza, con un conocimiento técnico sólido, es primordial si queremos conseguir un rendimiento energético óptimo. Con un correcto mantenimiento, conseguirás evitar costes operativos correctivos y un aumento del consumo a lo largo de la vida útil del equipo.
Monitoreo y control de las cámaras frigoríficas
Invertir en la monitorización de las instalaciones se ha convertido en una solución para conseguir una mejora de la gestión energética. Tener datos nos permite conseguir una optimización a tiempo real y la detección temprana de posibles fallos en la instalación.
Debemos tener en cuenta que para optimizar el funcionamiento de cualquier cámara frigorífica, la instalación debe ser valorada, proyectada y acometida por profesionales cualificados, ya que estos son los únicos capaces de producir esos ahorros tan deseados en la factura.
