En un panorama marcado por actualizaciones normativas constantes y desafíos como el aumento del costo de la energía, el mercado de la refrigeración ve más necesario que nunca alcanzar la eficiencia energética en sus equipos, no solo para garantizar la sostenibilidad de sus instalaciones, sino también para mantener su competitividad en el mercado. Hoy te contamos los retos a los que se enfrentan las empresas de refrigeración.
Retos para las Empresas Instaladoras de Refrigeración
La formación emerge como uno de los principales desafíos para las empresas instaladoras de refrigeración. Encontrar mano de obra cualificada y técnicos formados en las últimas tecnologías, es una tarea ardua, lo que representa una amenaza para la sostenibilidad del sector.
Equipos Más Demandados y Evolución de los Refrigerantes
Los equipos más demandados varían según el sector al que se dirijan, pero todos comparten la tendencia hacia la eficiencia energética y la calidad. Los requisitos de calidad y rendimiento energético están fuertemente influenciados por regulaciones como el ecodiseño y el etiquetado energético.
Respecto a los refrigerantes, la transición hacia alternativas menos contaminantes, como el CO₂ y el propano R290, está ganando impulso. Esta evolución tecnológica también incluye la introducción de componentes más eficientes y sistemas digitales de monitoreo.
Certificados de Ahorro Energético (CAES)
Los Certificados de Ahorro Energético (CAES), financiados por la Unión Europea, representan una oportunidad significativa para el sector de la refrigeración al promover la adopción de equipos más eficientes.
Además de proporcionar ahorros operativos y de inversión, los CAES facilitan el acceso a equipos de mayor calidad y eficiencia para los usuarios finales. Este enfoque en la eficiencia energética no solo beneficia al medio ambiente, sino que también impulsa la innovación y el crecimiento en el sector de la refrigeración.
Como hemos podido observar, el sector de la refrigeración se encuentra en un punto de inflexión, donde los desafíos regulatorios se transforman en oportunidades para la mejora y la innovación. Con un enfoque en la formación, la adaptación tecnológica y la búsqueda de soluciones sostenibles, las empresas deberán mirar hacia un futuro más eficiente y responsable desde el punto de vista energético.
