Hablamos continuamente de los diferentes tipos de cámaras frigoríficas, de la importancia de una correcta instalación y cómo conseguir un uso eficiente de estas instalaciones, pero, ¿nunca te has planteado cómo se montan? Hoy te lo explicamos con una guía paso a paso.
Montaje de una cámara frigorífica modular
Sobra decir que el montaje variará en función del tipo de cámara que se vaya a instalar, el fabricante, así como influirán las dimensiones de la misma y el terreno elegido para la instalación, haciendo imprescindible contar con un equipo cualificado que pueda atender las especificidades de tu proyecto.
En relación con el terreno, es importante que el suelo en que vayamos a montar la cámara esté completamente nivelado para garantizar tanto su estanquidad como el correcto cierre de la puerta, evitando fugas de frío que puedan afectar al rendimiento de la cámara.
Para ejemplificar este proceso de montaje hablaremos sobre la instalación de una cámara frigorífica modular y analizaremos todos los pasos del proceso, desde la recepción de la mercancía hasta el montaje y las pruebas de aislamiento.
Recepción de la mercancía.
Normalmente, tanto los materiales como el equipo suele recibirse en un camión, en la dirección donde se vaya a efectuar la obra. Es importante tener en cuenta que esta debe contar con una zona en la que sea posible la descarga del material y un acceso al recinto por donde pueda entrar la mercancía.
Habitualmente, esta se recibe sobre palets y estos se suelen mover sobre carretillas elevadoras o incluso a mano, panel a panel, si estos no son de grandes dimensiones.
Chequeo del pedido
Es imprescindible chequear antes de comenzar el montaje de que disponemos de todas las piezas necesarias y que las que se han recibido son las especificas para este proyecto. Si no, podemos encontrarnos con falta o abundancia de material que nos dificulten los pasos siguientes, provocando la demora de la finalización del montaje.
Lo más común es que en este pedido se incluyan: los paneles frigoríficos para las paredes y el techo de la cámara, el panel de suelo (en caso de que se haya especificado) la puerta, los postes de unión para los paneles con suelo y techo, la perfilaría sanitaria y luego los accesorios. En estos incluimos, los tapones, la tornillería, las tapas esquineras...
Una vez nos hemos asegurado de que hemos recibido todo lo necesario para comenzar es recomendable separar el material según su naturaleza, esto nos permitirá tenerlo ordenado y que en el momento del montaje sea más sencillo identificar dónde está cada cosa rápidamente.
El montaje
Paneles de suelo: Se fijan sus postes y se ponen las tapas esquineras de cada uno de ellos. En caso de que la cámara sea sin suelo, debemos recordar que este deberá estar totalmente nivelado.
Paneles verticales: Es importante antes de comenzar su instalación identificar el sentido con el panel de puerta, comprobando que los orificios de los ganchos coincida. Se colocan los paneles, los postes y las esquineras de los postes superiores. Por último se instalan los panes de techo
Perfilería sanitaria: Una vez montado todo el recinto, se fija la perfilería sanitaria, de tal manera que queden unos 4 cm antes de llegar a las esquinas para poder colocar ahí las tapas esquineras de la perfilería.
Por último, se instala a presión las tapas esquineras de la perfilería sanitaria para que quede con un acabado uniforme. Una vez colocado todo esto y los tampones plásticos embellecedores, la cámara estaría terminada y lista para la instalación del equipo de frío.
Recuerda, que aunque el proceso parezca sencillo, tu cámara frigorífica no es ningún mueble de Ikea, debes contar con un equipo de profesionales capaz de gestionar el montaje de tu instalación frigorífica.
